Now and Then: La Mágica Continuidad de The Beatles


Cómo un Acorde Cambió mi Vida

Todavía recuerdo el momento exacto cuando escuché por primera vez un tema musical de The Beatles. Venía de la habitación de mis padres hacia la sala de mi casa y allí, en una de las esquinas de la cuidadosamente ordenada y pulcra habitación, estaba encendido ese viejo televisor Admiral. Repentinamente, y como cosas del destino, ese compañero de infancia, y protagonista absoluto del casi poco entretenimiento de los jóvenes de nuestra generación, dejó sonar ese famoso y misterioso acorde inicial de la canción “A Hard Day’s Night”.



Pareciera que esa vetusta reliquia, testigo silencioso de nuestras aburridas cotidianidades, encendida quién sabe por qué extraña razón -pues no había nadie en esa sala en ese momento- aguardaba observándome pacientemente para lanzar sobre mí, a través de su hoy anticuado tubo de rayos catódicos, un embrujo que me acompañaría por el resto de mis días.

Sonido e imágenes me atraparon. Quedé absorto viendo la publicidad de algo que nunca antes había visto ni escuchado. Treinta segundos de imágenes en blanco y negro -no pudo haber sido de otra forma pues el televisor era en blanco y negro- que condensaban algo que parecía mucho más grande y profundo.

Sobre el acorde complejo y secreto, hecho con maña técnica por aquellos chicos de peinado gracioso, y mejorado por el productor George Martin con el sonido del acorde de un piano a mediado de abril del año 1964, se superponían las imágenes de aquellos músicos corriendo agitadamente y sonrientes, siendo perseguidos por una multitud de jóvenes desenfrenados quienes intentan atraparlos para asir algo que de todas formas era, y continúa siendo, intangible.

Era la campaña publicitaria que para el año 1982 se transmitía sobre un nuevo lanzamiento de la colección de discos de la banda británica, y durante las próximas semanas recuerdo haber estado cazando el momento oportuno para ver nuevamente esa música que me había sacudido desde lo más profundo de mi ser.


Y es que esa es la magia que tiene la música de The Beatles, generaciones tras generaciones surgen nuevos fanáticos quienes, al igual que yo, hacen de cada tema del cuarteto la banda sonora de sus propias vidas, con una música que parece nunca envejecer y que, al igual que en aquellos primeros momentos, sigue estremeciendo, inspirando y emocionando.

Aunque este no es el primer tema de la banda, pues el primer sencillo que los catapulta hacia la cúspide más alta de la fama es Love me do, lanzado el 5 de octubre del año 1962 en el álbum debut Please Please Me, es tal vez uno de los más importantes e influyentes de la historia, pues ayudó a consagrar a The Beatles como una de las bandas más grandes de su época, y sentó las bases para lo que fue la música pop y rock moderna.

 
La Resurrección de Lennon: El Sorprendente Nuevo Tema de The Beatles que Conmueve al Mundo

Quién pensaría que hoy, a poco más de 50 años de la separación de los fabulosos de Liverpool, escucharía yo un nuevo tema de la banda. Definitivamente en un mundo muy diferente, con un momento enrarecido por pandemias, conflictos políticos, guerras, crisis económicas, amenazas climáticas. En medio de todo ello nuevamente surge un tema de aquella banda que tanta ilusión produjo en una sociedad muy distinta a la actual.

Siento como si hubiésemos encontrado una botella con un mensaje enviado desde un lejano tiempo atrás en el que su autor, muerto en diciembre de 1980 a manos de un enloquecido fanático, nos pidiera que pensáramos nuevamente en él y que recordáramos de vez en cuando su mensaje de que el mundo necesita más amor y menos guerras.

Este nuevo tema musical, publicado el pasado 2 de noviembre de 2023, es producto de los logros de la tecnología actual, sustentada en la Inteligencia Artificial, la cual logró aislar la voz de Lennon en una grabación casera que hizo en su apartamento de New York sobe la cinta de un Cassette poco antes de morir en 1980.

Aunque los sobrevivientes de la banda habían intentado producir el tema en el año 1995, cuando mesclaron Real Love y Free As A Bird, para su álbum Anthology 1 y 2, Now and Then les fue imposible debido a que, por la forma en la que fue grabada, se hacía difícil separar la voz de John del sonido del piano con el cual se acompañaba, situación que imposibilitaba hacer una mezcla musical con el estándar adecuado para la super banda.



Así que el tema quedó engavetado hasta que McCartney descubrió una tecnología desarrollada recientemente por el director Peter Jackson, utilizada en la producción del documental The Beatles: Get Back, en la que se pudo extraer, gracias a la ayuda de la IA, conversaciones casi ininteligibles de las cintas originales, hasta sonar con una claridad asombrosa.

La cinta en la que se encontraba el tema fue preservada por la viuda de Lennon, Yoko Ono, quien la entregó a Paul. quién imaginaría lo que brotaría de allí.

La imagen de ese Cassette perdido inmediatamente me remontó a mi primer material de The Beatles, un Cassette similar grabado para mí por una maestra de primaria. Marcia me había comentado en una clase que un familiar suyo tenía una colección y ofreció grabarme una recopilación.

Esperé esa cinta con frenesí por días que para mí parecieron años. Cuando por fin lo reproduje en mi casa aluciné, no sin antes dañar los primeros cuatro segundos del tema If I Fell, pues no había retirado la pestaña de seguridad que protegía la cinta de ser borrada en caso de -estúpidamente- presionar la tecla rec junto a la de play.

Desconocía ese detalle. Fue mi primer cassette y la primera cinta de muchas que dañé o se quedaron enredadas en los cabezales de los reproductores de la época, cosa que sucedía muy a menudo, hecho que hace casi milagroso el poder rescatar hoy día un tema grabado en 1980. Todavía estábamos a años luz de los reproductores digitales.

Hoy día, cada tema de The Beatles me transporta rápidamente hasta algún momento de mi vida, a situaciones y lugares, a algún desamor, alguna frustración, alguna alegría. Esa es la magia que produce la música. Pero ahora llega un tema con el cual no tengo ninguna referencia para recordar con nostalgia.  Creo que en el futuro me remontaré a este momento tan extraño y complejo de mi vida, acompañado por los acordes de una canción que nunca imaginé.

Y es que nunca pensé poder escuchar un nuevo tema de The Beatles. Allí sigue la voz de Lennon más viva que nunca acompañada por los coros de Paul y Ringo, por la guitarra rasgada de Harrison grabada antes de su muerte y la percusión precisa inconfundible de siempre. Suena a The Beatles.

Gracias chicos por tanto. No saben en realidad el efecto que han tenido sobre millones de personas. La felicidad que han producido. Cambiaron la música, cambiaron la cultura, cambiaron la sociedad y la forma como diferentes generaciones miraron al mundo. Pero lo más importante, me cambiaron a mí. Now and Then I´ll miss you!

 

 

 

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